jueves, 23 de agosto de 2012
Historias 243 Sin aviso alguno
Aquella noche estaba en antro como siempre solo y bueno ya con más confianza no pero cuando estoy ahí me parece que el tiempo se detiene el olor a lociones de moda, humo las luces pero sobre todo la música hacen de ese momento únicos, siempre el salir de la rutina era una ganancia y pensaba cuando hay tiempo, ganas y disponibilidad debemos de hacer las cosas porque cuando no podamos nos lamentaremos.
Después de dar muchas vueltas a la pista sin éxito me gusta bailar un que solo la música dance porque no si bailar agarrado pero siempre solo aun que te das cuenta es una competencia, y te sientes como un aparador donde todas las miradas te llegan y te juzgan si pasamos la prueba la recompensa será una risa un saludos con un movimiento de cabeza y solo un idea en la mente de alguna persona intangible por no la vemos.
Me pare en una columna a un lado había aquel chico fornido más alto que yo solo recuerdo alce la vista me impresiono era una persona de gym aquel volumen de su torneado cuerpo no se podían ocultar de su ropa la verdad bastante bien, se dio la platica intercambiamos el protocolo y después de un rato nos retiramos del lugar.
Ya estando con realmente no lo podía creer era un oso porque no soló con estar marcado y con volumen aquel cuerpo era velludo me comento que en gimnasio le llamaban el toro y ahora sabía porque.
Bueno a veces cuando menos nos esperamos la oportunidad esta ahí mas cerca de lo podemos pensar a veces sin tanto esfuerzo solo el detalle que las circunstancia lo permita y sobre todo con responsabilidad.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario