Cuando tenía 5 años siempre estas fechas de Navidad eran de mucha ilusión y magia, cuando era niño sin preocupaciones la vida es un juego, el tiempo largo, pensaron el las fiestas, las posadas pero una de las cosas que siempre me gustaba como mi Abuela ponía su nacimiento me hacia volar la imaginación, pero cuando llegaba a casa le comentaba a mis padres porque no poner uno, pero en mi familia el esfuerzo que hicieron mis padres era mucha siendo ocho hermanos la verdad habría mas prioridades que la de poner un nacimiento así que solo me quedaba con la idea.
Ha veces pasaba por alguna casa con algún nacimiento y siempre era pensar en poner uno pero esos años ni como.
Paso el tiempo y ya en la secundaria en un diciembre junte lo que me daban mi padres y en vez de comprar ropa lo primero que hice fue comprar un figuras para mi nacimiento muy sencillo y de los más pequeños, la pena valía unque me fuera caminando a la escuela.
Paso el tiempo y ya con mi primer trabajo en un diciembre lo primero que hice fue a buscar mis figuras de nacimiento que había visto en un banco cuando niño así compre esas figuras , y puse mis nacimientos por muchos años.
Cuando tuve que abandonar mi casa por mis preferencias y porque la situación era complicada no tenía alternativa me pusieron un ultimátum que debía de abandonar esa casa por lo que sin tener lugar alguno ni saber a donde ir tuve que abandonar.
En mi recamara se quedaron mis recuerdos pero también esas figuras en aquel librero con el paso del tiempo alguna se han roto, el polvo se ve en aquellas cajas, escondiendo mi ilusión de niño esperando que algun día regrese.
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