miércoles, 23 de octubre de 2013

Historias 592 Historias de lo sobrenatural El salón



Javier se levanto aquella madrugada a las 4.00 a.m. eran sus primeros días como trabajador de limpieza en la Universidad al sur de la Ciudad México, realmente le gustaba su trabajo y le habían asignado el corredor del edificio B, algunos  salones  y un  pequeño auditorio de conferencias, solamente había dos personas en esa área, empezó a hacer sus labores el reloj marcaba las 5.15 a.m., paso de una aula a otra sin problema pero cuando paso de un por aquel pasillo largo y obscuro, las puertas de los salones están abiertas, camino entre dos salones y  entre reojo alcanzo a ver en aquel escritorio una maestra de pelo cano sentada  que lo miraba, al pasar solo penso que el catedrático había llegado temprano a clase, pero camino unos pasos, no era lógico lo que regreso Pero no había nada en el salón vació, el escalofrío recorrió su cuerpo y la sensación que los pelos de punta, pero no le dio mucha importancia.


Otro dia estando en el mismo pasillo pero ahora iniciando sus labores igual en la madrugada observo a lo lejos al final del pasillo como cruzo una sombra gris de igual manera le dio miedo y temor pero ahora si le comento a sus compañeros estando en la hora de la comida, al escucharlo todos se rieron y por lo que comentan que a todos se había pasado alguna situación anormal en  salón 13, la misma figura de maestra sentada o cruzando por aquel pasillo, o en ocasiones se escucha que cierran la puerta o pasos en aquel pasillo, solo más temor pero a todos  ya conocían las historias lo que no saben quien es.
       Pasaron algunas semanas y hasta se le olvido lo que pasaba en aquella parte de la escuela una ocasión entro aquel pequeño auditorio estando limpiando  por ahí escucho que tiraban algunos libros, pero no había nada, continuo con sus labores solo escucho como se cerraba la puerta, no le tomo importancia porque su compañero de área estaba en pasillo pero al querer salir estaba encerrado alguien lo había encerrado empezó a tocar pero no tuvo respuesta un poco de temor pero se hacía fuerte pero unos segundos se fue la luz de aquel auditorio fue cuando pego el grito asi solo su compañero se dio cuenta y le abrió.

Muerto de miedo hablo de lo sucedido y le respondieron que  es normal que los encierren en aquel lugar lo que le dio mas miedo, y se entero que siempre a los nuevos trabajadores siempre los dejan esa área la del pasillo junto al salón 13 porque  ya saben lo que les pasa y si superan esa parte  ya la hicieron.

Desde ese entonces toma muy en serio sus labores y al pasar por aquel corredor solo reza una oración para que no le pase nada, y esta semana hay un nuevo empleado de intendencia lo al enterarse se le dibuja  una sonrisa en su cara pero  a la vez le da escalofrío.


No hay comentarios:

Publicar un comentario