lunes, 7 de octubre de 2013

Historias 581 Cuando las miradas se cruzan.


Estaba en aquella fiesta ha hacia pocos días que había terminado con aquella relación enfermiza, me habían invitado unos amigos de la alberca, no conocia a nadie más que al anfitrión, la música la gente el sonido de que la gente habla, las risas el humo del cigarro hacen como un magia para alejarse de la realidad y pensar en muchas cosas, entre ellos los recuerdos o los sonidos de aquella canción me remonta algún lugar donde ere agradable porque tenia a alguien pero hoy no y de repente regreso aquella realidad entre mucha gente, de repente no te aquella mirada  de que hombre que me observaba por un momento pensé seré yo quizá una equivocación, pero la segunda vez creo que es para mi esa mirada.

En ese momento la emoción como la primera vez cuando conoces a alguien, el saber que llama uno la atención es  esa sensación agradable que no podemos controlar, pero esta ahí presente, siempre, no debemos de buscar o forzar las cosas porque estas se dan por si solas.

Entre los misterios de la seducción hay muchos recursos disponibles: la voz, una sonrisa, la actitud, una pose… Pero ninguno de ellos alcanza el impacto del instante en que dos miradas se cruzan. Y si ese cruce es el primero, entonces el efecto se potencia y la mirada se vuelve poderosa. Habrá quien logre sostenerla y habrá quien desvíe la suya, o porque no se anime a disfrutarla o porque directamente la rechace.

Los varones gays lo sabemos muy bien. En un boliche, en un bar, en cualquier lado, en realidad, cuando dos hombres extraños cruzan sus miradas, y es raro, porque sin mediar palabra los dos ya saben que ahí puede pasar algo. Creo que la clave no es tanto “cruzar” la mirada, sino “sostener” la mirada. Y es que el cruce de miradas se me antoja que puede llegar a ser algo más casual, incluso accidental.

El contacto con los ojos mirar a los ojos de otra persona- es un acto de comunicación muy poderoso. que normalmente restringimos a muy breves momentos. Prolongar un contacto de ojos o encontrarnos con la mirada de una persona indica una intensa emoción.


El contacto con los ojos es tan perturbador que en un encuentro de tipo social, evitamos el contacto de ojos por más de un segundo. Entre una multitud de extraños en un sitio público, el contacto de ojos apenas dura una fracción de segundo, y la mayoría de gente incluso evitará todo contacto con los ojos.
      

Algo que debes saber de las miradas cuando se trata de ligar.


¿Deseas ligar con la mirada con atractivo extraño? Incluso en una habitación llena de gente o en una fiesta puedes mostrar de forma efectiva con tu mirada que estás interesado en esa persona. Simplemente mantén la mirada fija a sus ojos por más de un segundo no mucho más puesto que tu mirada resultaría amenazante o agresiva. Puede ocurrir que:

Esa persona mantenga la mirada contigo por más de un segundo, entonces hay bastantes posibilidades de que la persona responda a tu interés.

Tras el contacto inicial, esa persona retire la mirada brevemente y entonces vuelva a mirarte fijamente una segunda vez, entonces puedes asumir con certeza de que él está interesado.

El contacto de ojos o encuentro de miradas vaya acompañado de una sonrisa, entonces puedes aproximarte a esa persona con confianza.

Esa persona evite mantener la mirada contigo, o retira la mirada tras una fracción de segundo y no vuelve a mirarte de nuevo, con lo que debes interpretar que tu interés no es correspondido.

También hay la posibilidad de que esa persona sea en realidad muy tímida o que sea comprensiblemente precavidos a la hora de mostrar interés por hombres extraños. La única forma de averiguarlo a través de su comportamiento con otros.

Recuerda que con la mirada puedes lograr muchas cosas y también saber si otra persona esta interesada en uno, esto es básico sin tener que forzar las cosas saber si uno tiene posibilidad de que otra persona nos conosca.



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