martes, 26 de agosto de 2014

Historias El examen





Subo corriendo la unidad de transporte  se me hace tarde para ir a la universidad, ese día tengo examen, preocupado porque es a la primera clase,  en aquel transporte público a tope de gente que hasta es complicado viajar  es la  hora pico no cabe ni un alma, y de alguna manera tengo que llegar no importa cómo, y por ahí se desocupo un lugar  y es mi oportunidad para ir sentado todavía faltaba para llegar a la escuela.


Ya sentado era buen  tiempo de poder abrir aquella tarjeta técnica para repasar las formulas y los conceptos para el examen, un que es algo difícil con tanto ruido, la gente en aquel transporte mal llamado Microbus (transporte popular) en la Ciudad de México,  pero sobre todo la música de cumbia a todo volumen  del señor operador (conductor) para que no se olvidara de México con  sus sonidos populares y característicos ni para poder concentrarse.

Por ahí escuche entre tantas voces una que sorprendió más por el toque y una voz grave como locutor de radio, alce la mirada  pude observe aquel hombre de barba de candado, cabello largo y usaba lentes, usaba una playera blanca pero se delineaba bien torso no era fornido pero tampoco flaco, y por ende velludo, no podía dejar de ver porque estaba tan guapo, yo lo miraba y creo la mayoría personas en su mayoría mujeres que estaban ahí, la pregunta como mirarlo sí que lo tome a mal o me diga alguna cosa por mirarlo o hasta me grite que le veo o me llame puto no lo sé ni mejor averiguarlo.

Aquel hombre se paró en el pasillo  a unos pasos de mí y cuando me día cuenta ya lo tenía enfrente parado enfrente de mí y que vista panorámica aquel monumento viviente muy guapo, ahí en ese momento hasta por mi mente fantasías y pensaba que técnica usar para llamar la atención o por lo menos una sonrisa, no se ocurre ninguna, pensando en todo menos en el examen en vez de darle ultimó repaso a mis notas, que hacer para llamar la atención de aquel hombre guapo la verdad lo miraba discretamente pero creo se dio cuenta y la pena que voy hacer me dirá algo no lo sé.

Pero la realidad regresa, porque esa reacción porque esos pensamientos, la respuesta la naturaleza humana se presenta cuando menos lo pensamos o cuando se hace presente  y a veces no podemos controlar porque es por instinto ese instinto de que llama la atención un hombre la verdad algo que no medimos ni tenemos control, se puede decir que es la química.


En ese momento la Microbús se  frenó bruscamente,  alce la vista y ahora las miradas se cruzaron, yo mirando aquel hombre joven,  que felicidad había logrado mi objetivo, pero no me había percatado que ya me tenía que bajar, la reacción y la decisión seguir en ese transporte o bajar corriendo para llegar  al examen que más importante, así aquí estoy llenado mi  examen sudando la gota  pero con una satisfacción aunque fuera fugaz y la pregunta ni le pedí su número de teléfono en aquellos años no había celulares  ni supe ni como se llamaba nada, días después  volví a pasar por el mismo camino  en varios viajes de aquellas microbuses con la esperanza de volver a encontrarlo pero jamás lo volví a ver. 


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