miércoles, 19 de junio de 2013

Historias La infidelidad



Cuando  tenía mi primera relación las cosas siempre las veía color de rosa siempre cuando se enamora ve le en forma muy lejana e inimaginable el término de una relación y más cuando alguien te engaña es una situación demasiado lejos, pero esta más cerca de lo que uno imagina.

Antes de saber y aceptarme como gay, veía la infidelidad  algo que nunca pasaría y bajo por parte de una persona que decía "amar" a otra. Claro que todas esas personas que yo veía y sabía que eran infieles eran el 100% de los hombres.

Hace algunos  años que me acepté como gay, como homosexual, sabía que esta vida no es fácil. Sé que de por sí la vida es difícil, siendo gay, lo es aún peor.

Comenzar una relación afectiva representa para muchos, sino es que para todos, el inicio de una nueva etapa en la vida; significa la llegada de nuevos “hábitos” sentimentales y por tanto, un crecimiento mental y emocional.

Sin embargo, el arribo de un tercero en discordia marca la diferencia entre el “amor eterno” que los dos se habían jurado, y aquella milenaria forma de decir: “te juro que eres el único en mi vida”. Sí, la infidelidad que como actitud genera “severos” daños sentimentales y hasta irreversibles, como el suicidio.

Por más que me trato de explicar ahora sé que en el medio es complicado para todos el vivir en un sociedad más abierta y sobre todo con muchas modas y estilos de vida que llegan de otros países en la manera que ven la sexualidad, es muy light pero bueno yo siempre he creído de las relaciones estables son posibles, pero he visto que hasta el ligue se da hasta en lugares que menos imaginamos, aquí nuestra mejor herramienta es la comunicación, la confianzas y la seguridad de una relación, porque la infidelidad la podemos iniciar con solo pensar, y bueno solo es cuestión de suerte pero sobre todo de la que una relación, ambas partes tengas los pies bien plantados en la tierra., solo nos queda avanzar e ir sobre llevando a la vida, porque es dar tantos giros que una de esas nos lleva de corbata.


Las  razones más comunes por las que 'ponemos los cuernos' son por satisfacer las necesidades no halladas con la pareja

Una de las peores traiciones hacia nuestra pareja o por parte de ella es la infidelidad. Generalmente pensamos que la persona infiel es la única culpable, sin embargo la infidelidad es el resultado de la crisis de una pareja, pues quien es infiel lo hace porque busca en otra persona cuestiones sexuales, emocionales o intelectuales que su pareja no le da.

La infidelidad no sucede espontáneamente, siempre hay motivos que la provocan. La lista de razones es interminable, pero coinciden en que en todas se intenta satisfacer las carencias en la pareja:

Las  razones más comunes

1. Nos sentimos devaluados. Terminado el enamoramiento, enfrentamos a la pareja real y olvidamos a la idealizada, y sus conductas no siempre placenteras en la convivencia defraudan nuestras expectativas. Si la pareja nos abandona al centrarse sólo en sus objetivos personales. 

2. La monotonía. Cuando nuestra pareja descuida el tiempo en común por sus actividades personales y deja de tener detalles cariñosos con nosotros, sentimos que el amor se acabó, se produce un distanciamiento y nos empezamos a sentir encadenados a pasar el resto de nuestros días en una relación que ha perdido su encanto

3. Una vida sexual deficiente. El sexo es un elemento esencial en la pareja y si éste es defectuoso, quien se siente insatisfecho tiende a buscar fuera de la relación la satisfacción sexual que no encuentra en su pareja. 

4. Dependencia emocional de los padres. Si nuestra pareja no es emocionalmente independiente de sus padres y no establece límites respecto a ellos, esta conducta infantil nos hace sentir sin su apoyo, y nuestra necesidad insatisfecha de ser escuchados y atendidos nos impulsa a buscar una relación extramarital.

5. Buscamos nuevas sensaciones. Si se acaba la seducción del enamoramiento y se vive en el hastío de una relación, hay quienes necesitan seguir satisfaciendo su necesidad de seguir enamorados. La curiosidad de experimentar el sexo con otras personas y de vivir la aventura es un fuerte motor para buscar.

6. Idealizamos a la pareja. Para continuar idealizando a nuestra pareja, muchas veces elegimos como amante a una persona totalmente opuesta. Hay quienes llevan a cabo todas sus fantasías sexuales con el amante y no con la pareja para sentir que la siguen manteniendo en el concepto de "decente".

7. La pareja lo permite. Se dan casos en que la pareja está de acuerdo en que tengamos relaciones extramaritales, porque es consciente de que necesitamos satisfacer las deficiencias que existen en nuestra propia relación., esto es común vemos relaciones abiertas pero no me gustan, soy de las relaciones más estables.


8. Sentimos amenazada nuestra libertad. Cuando la pareja es asfixiante o nos da pavor perder nuestra independencia y quedar atrapados en una relación, intentamos sentirnos libres cometiendo actos de infidelidad.

9. Alarde de poder. Por haber obtenido poder, dinero y una posición social, hay quienes sienten que se han ganado el derecho a tener un mayor potencial sexual con el sexo opuesto.

La infidelidad es un síntoma de la serie de crisis por las que atravesamos como pareja. Si buscamos en el fondo, descubriremos que somos infieles cuando no encontramos en nuestra pareja lo que buscamos y nuestra relación no satisface completamente nuestras necesidades. Sin embargo, superar la crisis dependerá de la forma en que podamos comunicarnos como pareja.



No hay comentarios:

Publicar un comentario