martes, 11 de agosto de 2015

Historias Origen del Mito de los " 41 "


Uno de los números que tiene mala fama en México el decir 41 número cabalistico, aqui la historia, fue el escándalo más sonado de los siglos XIX y XX,  el número 41 no tiene ninguna validez y es ofensivo para los mexicanos,  La influencia de esa tradición es tal que hasta en lo oficial se pasa por alto el número 41. No hay en el ejército División, Regimiento o Batallón que lleve el número 41. Llegan hasta el 40 y de ahí se salta al 42. No hay nómina que tenga renglón 41. No hay en las nomenclaturas municipales casas que ostenten el número 41. Si acaso y no hay remedio, el 40 bis. No hay cuarto de hotel o de Sanatorio que tenga el número 41. Nadie cumple 41 años, de los 40 se salta hasta los 42. No hay automóvil que lleve placa 41, ni policía o agente que acepte ese guarismo Referencia Francisco L. Urquizo


 La madrugada del 18 de noviembre de 1901 se llevó a cabo la conocida “Razzia de los 41”, en la entonces Calle de la Paz, hoy Ezequiel Montes, en el Centro Histórico de la ciudad de México. En el sitio se celebraba una fiesta privada de personas homosexuales, donde incluso había personas travestis.

... Bajo la consigna de que la fiesta se celebraba sin permiso, el domicilio donde se llevaba a cabo dicha reunión fue allanado y detenidos sus asistentes.

Estos hechos causaron gran conmoción en la sociedad porfiriana de aquella época que velaba por las buenas costumbres. Sin embargo, debido a que gran cantidad de los participantes eran “aristócratas” de la época, se consideraba a la homosexualidad como un mal burgués, y se encubrió a gran cantidad de los participantes.

Este es el caso del “Primer Yerno de la Nación” Ignacio de la Torre y Mier, yerno de Don Porfirio Díaz y antiguo hacendado en Morelos, logró evadir la justicia.(Se dice que tuvo algo que ver con Emiliano Zapata su caballerango)

Las sanciones para los asistentes a aquella reunión, fueron sumamente fuertes, aunque se rumora que debido a que entre los asistentes se encontraban miembros de las élites porfirianas, sólo se castigo a aquellos que carecían de injerencia en las autoridades.

Las sanciones fue que a 22 de los asistentes se les apresó y rapó para ser distinguidos en la Cárcel de Belén, mientras que a los 19 encontrados vestidos de mujer fueron remitidos a Yucatán a realizar trabajos forzados en el ejército.

La mayoría de los participantes en dicha reunión mantuvieron el anonimato, por investigaciones realizadas se menciona como posibles asistentes a dicha reunión a Antonio Adalid, al periodista Chucho Rábago y al hacendado sinaloense Alejandro Redo, aunque sólo se conoce a ciencia cierta el nombre de tres: Jesús Solórzano, Jacinto Luna y Carlos Zozaya.

El asunto llega tan lejos que el número 41 pasa a ser tabú

  



No hay comentarios:

Publicar un comentario