sábado, 8 de marzo de 2014

Historias 645 Los pasos de la vida



Caminando por aquella calle, el tiempo es soleado, cada paso mirando el piso, pensando por momentos  las cosas hasta ahora no son el todo, como que no es lo hubiéramos querido, o por una causa u otra las cosas no son como queremos, pero estamos aquí, y creo es ganancia, y bueno habrá que poner más empeño para que las cosas salgan mejor, por ahí observo un bache, y también esas raíces de aquel fresno que han roto el concreto de la banqueta, El árbol crece y sus raíces también siempre buscan espacio aunque el concreto este duro lo rompen, porque uno no ser así que a pesar de los fuertes vientos, de las apreciaciones, de los amores que no son, de los sentimientos rotos, de la esperanza perdida, de las noches impacientes, y de ese vació no solo en el corazón si no del alma.

Siempre he procurado dar siempre lo mejor pero por más esfuerzo que hago los resultados no son como uno quiere o espera, a veces me pregunto cuando observo aquella pareja agarrada de la mando caminando también que hace falta para ser felices.

El trabajo hasta ahora no ha mejorado pero esa pude ser una de las causas, pero me encuentro entre la espada y la pared que hacer que no hacer, cuando también en lado del corazón, las cosas fallan y duelen pero el detalle no somos honestos, debo de aterrizar las cosas pero no hago, y no planteo las cosas como son y cómo deben de ser, el amor no solo es compartir las cosas más simples,  si no va desde amor en alguna frase hasta el amor mismo.

 Todo es un complemento de muchas cosas que deben funcionar como los mecanismos de un reloj, a la perfección aquí es igual para que funcione una relación son muchos ingredientes que al final se traducen en un platillo que engrandece el alma y a la persona.


Sigo caminando y ahora pisando las algunas hojas que se han caído porque estas ya dieron su función y así es un ciclo porque me falta el valor de cumplir con ese ciclo si las cosas podemos cambiar, porque no hacerlo ahora que se pude porque todavía es tiempo, y vendrán nuevos tiempos y no esperar a que el invierno de la vida llegue con esa soledad.


Por fin llegue a donde tenía que llegar. 

    

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