miércoles, 4 de junio de 2014

Historias 658 Compañero natación.




Me toca la clase de natación me toca pararme a las 5.00 a.m., y apresurado tomo la maleta es temprano en la calle  realmente no hay gente,  llego a la alberca olímpica a las 5.45 a.m.  es temprano por lo que me siento en ese espacio a esperar a que abran la puerta y otra clase, este día también es especial, porque volveré a toparme con Francisco un compañero mayor que yo, de los más avanzados de la clase.

Ya casi por iniciar los entrenamientos llega Francisco apresurado y como siempre me dio gusto él volver a verlo, sin pensar que solo el día anterior lo había visto también en clase,  la verdad no sé que me pase pero he sentido un afecto especial por  él.

En realidad no sé que me pase a veces me pone en situaciones incomodas, pero no sé yo estoy consiente  que soy gay aunque soy de closet y más aun en la alberca cuando la vista mira para todas partes, y las cosas que uno observa, pero siempre reservados, pero es algo especial  ese afecto que siento a veces me imagino tantas cosas que creo puede ser malo, como construir castillos de arena pero a la vez solo pasan en mi mente, porque Francisco me comenta de su familia, hasta de una enfermera que creo que le gusta y ahí es cuando se me cae ese mundo ficticio ejeje.

Mi compañero de clase no tiene el cuerpo marcado es fornido, su bigote lo hace especial,  a veces lo poco conversamos algo de algún tema, pero nada de los asuntos personales, pero realmente no logro comprender lo que me pasa, creo esos son los sentimientos puros y que la gente vale mas por lo que es, por lo que nos representa pero sobre todo por esas emociones que no hacen sentir bien, a veces lo mas valioso de la gente es aquello no vemos que nos cuesta trabajo conocer, pero ese sentimiento que yo siento es padre
Sé que a lo mejor no seré correspondido pero lo siento.

Con él entrenaba después de ir a natación, corría  en los viveros un parque aquí cerca en Coyoacan una ocasión llovía y hacia frío pero al correr hasta vapor sacábamos de la ropa y al hablar, que tiempos aquellos, el convivir y no poder expresar a esa persona lo que siente uno, porque realmente no imagina uno la reacción pero asi era.

Una ocasión le comente que me desesperaba porque hacia mucho ejercicio y realmente no se notaba y me miraba igual él me comento sabes el  hacer algún  deporte en forma constante quizá los resultados no las veras rápidamente porque  en cada persona lo metabolismo es diferente pero es una inversión a largo plazo cuando pase el tiempo y veas a la gente contemporánea te dará cuenta de esa inversión en tu apariencia física.


Por ahí en esas fechas cuando pensaba decir a Francisco lo que sentía por él, deje de ir a entrenar  y pasaron los días  tarde unos años en regresar a entrenar, y finamente regrese por las mañanas pero ya no volví a encontrarme  perdí el rastro de aquel amigo, y desde ahí el concepto del amor platónico lo logre comprender pero no fue el único en la escuela, en la universidad.


Y bueno ahora que estoy escribiendo vuelvo a recordar esas emociones perdidas  y esa sensación que muy difícilmente podremos olvidar.

    










No hay comentarios:

Publicar un comentario